Ya llega

Parece que ya llega la primavera.

Los parques estan llenos de gente, pero la hierba sigue quemada y aún quedan montañas y montañas de nieve (la de la foto es pequeñita, pero los charcos os darán una idea)

No es que nos hayamos quitado el abrigo, que no, pero al menos el sol luce casi cada día y podemos ver el cielo azul (pese a las nubes de ceniza cercanas).

Azul arriba

Azul abajo

Sólo espero ver florecer las primeras florecillas y que la hierba pierda ese color amarillento que tiene ahora. Entonces prometo llenaros de fotos de la primavera, que os lo aseguro, es un evento mágico por aquí.

El mar sigue parcialmente helado, pero en ese café del fondo, había el Domingo finlandeses disfrutando de la terracita.
No os cuento que hacía un viento cortante y que la temperatura no subía de los 9ºC, pero aquí ya llego el tiempo de la terraza.

Gracias a todos por interesaros por mi hermano. Ya fué a Basilea y volvió. Está contento con el examen, pero no sabe cuantas plazas ofrecen y hasta Mayo no le envían la respuesta. Continuaremos crizando los dedos hasta entonces.

Joe contra el volcán

A mi madre le encanta la música.

Tanto, que cuando mi hermano pequeño quiso ir al conservatorio, no perdió un momento en ir a apuntarlo.

Eso sí, mi hermano puso una condición. Él no quería aprender a tocar el piano, el violín o la tuba. Él quería aprender a tocar el tambor.

El tiempo ha ido pasando y lo que empezó siendo una afición, una actividad extraescolar, se ha terminado convirtiendo en algo más.

Mi hermano quiere ser percusionista profesional. Dedicar su vida a la música, a aprenderla, a sentirla, a tocarla.

Lo que parece sencillo a primera vista, en la realidad no lo es.

Las escuelas son elitistas. No hay tantas plazas como para aquel que quiere ser médico o ingeniero. En muchos de los casos se oferta una plaza, dos o ninguna, así que sólo los mejores pueden perseguir su sueño.

El lunes mi hermano tratará de dar un paso más en ese camino. Se presenta a las pruebas de acceso de la Hochschule für Musik en Basilea.

Ha costado llegar hasta aquí. Muchos callos en las manos, muchas horas de ensayo, de estudio. Muchas noches soñando con el futuro para ahora ser parado por un volcán.

Imagen de Halldor Kolbeis/AFP

Tras un día de llamadas, de búsquedas, de consulta a las previsiones del tiempo y de mucha voluntad, tres personas salen hacia Basilea en coche. Para perseguir un sueño. Para no rendirse, cruzar los brazos y dejar que el destino decida.

Nosotros estamos contigo Miguel.

Confiamos en tu talento, en tu empeño y en tu sueño. Porque el mundo es mucho mejor si queda gente que lucha por lo que quiere, que no conforma con lo que tiene.

Viel Glück pequeño!!

Saliendo del frío

Hoy por fin se levantó soleado.

El sol nos despertó por la mañana y no tardamos nada en vestirnos y salir a la calle.

No eramos los únicos, las calles y los parques estaban llenos de gente que aprovechaban el buen tiempo (10º es casi plena primavera).

Nos quedamos bastante sorprendidos de ver este animal. Parece que todo va saliendo de la hibernación.

Poco falta para que todo se vuelva verde y aparezcan los colores de las flores, pero por ahora seguimos sin despedirnos de la nieve.

Este es el aspecto de la playa, el mar todavía helado y la playa nevada. Eso sí, ya no se puede pasear por el mar, esquiar y mucho menos pasar con el coche (durante todo el invierno era posible).

Nosotros, como el señor pato, seguiremos mirando al cielo y pidiendo que siga siendo azul.

Abril aguas mil

Eso es lo que dice el refrán y al menos, es lo que está ocurriendo al inicio de este mes.

Acabo de llegar de disfrutar de mi última visita a casa hasta que seamos 3 en la familia así, que mientras me acostumbro a la vuelta os dejo con mi calendario de abril.








¡Felices pascuas a todos!