Aunque no lo parezca ya hace dos semanas que hemos vuelto del calor, del sol y de los ratos muertos disfrutando sin hacer nada.
Nada más volver, como somos muy chulos, nos mudamos de casa y sólo hoy he conseguido finalmente montar la mesa del despacho y encender el ordenador.
No era mi intención estar tanto tiempo desconectada, pero ya se sabe, Cosas que Pasan.
Para inaugurar la vuelta, os traigo mis doce tesoros portugueses. Jackie los propuso como un juego para mostrar de una manera diferente el lugar en el que pasabas el mes de Julio y aquí os traigo los míos.
El primer tesoro era un puesto de frutas y verduras. Paseando por el barrio lisboeta de Graça encontramos esta:
Una frutería como las de antes, sólo con productos de temporada y con un tendero que conoce a la gente del barrio y que siempre pregunta por la familia. De las que me gustan a mí, vamos.
El segundo tesoro hablaba de encontrar un lugar favorito.
Podría hablaros de nuestro apartamento en Lisboa, de las calas desiertas en las que sólo se oía el rugido del mar y que compartíamos con otras dos sombrillas o enseñaros la hamaca colgada del árbol o los campos al atardecer bañados por el sol de la tarde.
Pero después de mucho pensar creo que nuestro lugar favorito era este:
En el medio del campo Alentejano, colgada del árbol. El sueño de cualquier niño, incluso si no llegas a tener dos años y los escalones son gigantes para tu edad. Fue amor a primera vista y allí pasábamos un rato todas las tardes. Cantando, jugando o simplemente escuchando como en su media lengua nos explicaba como había ido el día. Felicidad en estado puro.
Si no lo supiérais ya, con el tercer tesoro podríamos haber jugado a adivinar dónde hemos pasado las vacaciones. Reflejados en la ventana, los azulejos típicos portugueses, a cada cual más bonito.
Y volvemos a los atardeceres en el Alentejo, porque el cuarto tesoro era un columpio.
Este era demasiado peligroso para que el peque subiera sólo, más que nada porque todo quiere hacerlo solo y nadie puede ayudarle, pero juntos, subíamos todos los días un poquito hasta tocar el cielo.
El quinto nos traslada a la noche Lisboeta, con el sonido del tranvía, el olor de las sardinas fritas y el tacto de la brisa fresca.
El sexto era sencillo. Es verano, hace calor y siempre, siempre, apetece un helado. Curiosamente el momento no llegó nunca. Cuando nos apetecía estábamos en el medio de la nada y cuando pasamos enfrente de la heladería más famosa de Lisboa, Santini, Pol decidió que era el momento de bajar a toda mecha la cuesta.
A la vuelta, en medio del aeropuerto de Munich nos encontramos esta y ni corta, ni perezosa, saqué la cámara e hice click.
Puedo prometer y prometo que rastree los suelos de todos los lugares que pisamos buscando el tesoro número 7, pero así como las paredes estaban llenas de graffitis, los suelos estaban limpios de dibujos, escritos y garabatos.
Esta fue nuestra dedicatoria personal a los paisajes portugueses, en los que dejamos un trocito de nuestro corazón.
Y de vuelta a Lisboa para encontrar el tesoro número 8: movimiento. Porque Lisboa es prisa y calma al mismo tiempo, sólo hace falta encontrar el momento.
(Y si, está movidísma, pero no me llevé el trípode y siempre tenía un peque que quería ver lo que mami estaba haciendo)
Como la paz en la que encontramos el tesoro número 9: libros.
Mientras Pol dormía la siesta a la sombra de un árbol, yo me dedicaba a subir y a bajar todas las escaleras por las que no podíamos pasar cargando con una silla y un niño. En una de ellas encontré mi tesoro. Una librería diminuta atestada de libros de arriba a abajo, tanto que los libros se extendían hasta la calle conquistándola.
Un sueño de lugar, os lo aseguro.
El décimo tesoro pedía un banco en el parque, pero no los encontramos. O sí, pero mientras corríamos arriba y abajo no había tiempo de fotografiar bancos y ni mucho menos interesantes para enseñároslos.
Este lo encontramos mientras paseábamos sin rumbo por el barrio de Alfama, en Lisboa. Estoy segura de que ha sido testigo de muchos secretos de alcoba, resultados de partido de fútbol y conversaciones pausadas a la fresca de la tarde. ¿No os parece lo mismo?
Y casi terminamos con las postales. Esos trozos de papel que nos muestran un trozo de ciudad. En blanco y negro o a todo color.
Pero esta vez prometo volver pronto y enseñaros poco a poco todo lo que hemos disfrutado.
Ah, por cierto, el sábado día 18 Pol cumple 2 años y pensamos celebrarlo por todo lo alto. ¡La ocasión lo merece!. Si veis que no aparezco, es que estoy construyendo coches.
¡Nos vemos!
¡Qué bonitas Conchi! Me han entrado unas ganas de volver a Portugal... ains!
ResponderEliminarMis tesoros se han quedado en el pueblo, nuestras vacaciones empiezan en una semana ¡por fin!
Besitos!
La verdad es que es un sitio precioso. Y tan cerquita,...
EliminarMaraBilloso!!!
ResponderEliminar;)
EliminarPreciosas fotografías y preciosos recuerdos y tesoros.
ResponderEliminarBesos
Que fotos tan bonitas, seguro que habeis tenido unas magnificas vacaciones, lo xungo es que a la vuelta el reloj aun va a tiempo diferente que nuestro cuerpo y mente. Pol seguro que ha crecido n monton y casualidad mi sobrina Aina tambien los cumple el 18 .
ResponderEliminarsalutacions
¡Qué casualidad!
EliminarPol ha crecido mucho, si y le costó acostumbrarse, al menos a la hora de dormir, que a la vuelta parecía que no llegaba nunca.
Ohhh!no veas la emocion que me ha entrado!que de recuerdos ( compartidos)
ResponderEliminarYo no me acorde de los tesoros hsta que llegue a casa((De vacaciones se me queda la mente en blanco y olvido hasta mi nombre)...pero al ver mis fotos vi que hice del tema sin proponérmelo,así que algún tesoro tengo...
Un beso mujer ya instalada!
Y deseando ver el parque movil! :D
mart a.
Martuchi, y sin poder vernos, qué rabia.
EliminarQuiero ver tus fotos
Nosotros también acabamos de volver de Portugal!
ResponderEliminarPero hemos estado en Oporto y Aveiro. Nos ha encantado, todo es precioso.
Felicidades a tu peque, pensaba que era mayor, como Jon que cumplió tres en junio, se le ve tan grande! A disfrutarlo!
www.mykitschworld.blogspot.com
Que bonitas fotos, parece que las vacaciones han sido maravillosas, es que portugal es especial, a mi me encanta oporto ;)
ResponderEliminarEstán preciosas las fotos, felicidades para Pol y que la creatividad se dispare con esa celebración, por cierto, paso por aquí de vez en vez y veo que tu nene está suuuuper grande, felicidades, de nuevo.
ResponderEliminarConchi, que tesoros mas bellos! Y es que Lisboa es tan bonita!
ResponderEliminarMuchas felicidades a Pol. Espero que lo pasara fenomenal en su cumple.
Un besote!
hola Conchi,
ResponderEliminarme he acordado de ti buscando una casa rural, hotelito... en el Alentejo. Me podrías decir dónde estuvisteis vosotros? , otra cosa será que encuentre sitio claro....
es el primer año que a finales de julio todavía no tengo pensadas las vacaciones y tengo una ansiedad horrorsa. Pensando, pensando me he acordado de tí y de lo que hicisteis el año pasado. si puedo, te lo voy a copiar igual igua.
gracias por tu ayuda.
mi dirección de correo es: inma.vega@yahoo.es