Al final no salimos de casa y desayuné tranquilamente leyendo cuentos con el peque, pero sirvió para acordarme de esta panadería que conocimos cuando visitamos Copenhagen y que había prometido a @iverina contarle dónde estaba.
El sitio se llama Nordisk-Brødhus y estaba al lado del apartamento en el que nos quedamos a dormir, del que os hablaré otro día porque es una auténtica maravilla.
Es una panadería de las de antes, esas en las que el pan se hacía lentamente, los ingredientes eran naturales y olía siempre como si estuvieras en el cielo.
Aquí en Helsinki no las hay, o yo no he sabido encontrarlas, y cuando vamos a España sólo las disfrutamos si vamos de excursión a algún pueblo. No pude evitarlo, entrar allí me devolvió a los olores de la infancia.
En esta mesa estaban preparando muesli para el desayuno del día siguiente.
La fruta era de verdad y se secaba al sol, junto con miel, frutos secos y la típica granola.
A pesar de ser una panadería, tienen un par de mesas corridas dónde puedes sentarte a disfrutar de un sandwich, de un bollo o de todo un desayuno recién hecho.
Damos fé de que tanto lo dulce, como lo salado están de rechuparse los dedos.
A pesar de que no hay mucho sitio para sentarse y que había gente entrando y saliendo continuamente, no tuvimos en ningún momento la sensación de estar de paso. Los clientes se tomaban las cosas con calma, leían sus revistas, trabajaban con el ordenador o estaban enfrascados en conversaciones, seguro la mar de interesantes.
Pol disfrutó como un enano con un par de tricilos antiguos que había por allí, coches que estaban de decoración, pero que nadie le pidió que no tocará y mirando y remirando a la gente.
Y por si todavía nos lo he contado, todo estaba cuidado al detalle: las vajillas, distintas pero con mucho estilo, la cubertería antigua, las tablas donde te servían la comida, las servilletas, el azucarero o la lechera, todo daba esa sensación de casual pero especial que tanto me gusta.
Vamos, que me teletransportaba ahora mismo a tomarme la merienda. Si os apuntáis, os estamos esperando. Eso sí, al solecito, si no os importa.
Me encantaría visitar Dinamarca, es uno de (por desgracia muchos) viajes pendientes, así que ahora va a notado a mi carpeta correspondiente, por si un día logro hacerlo ;-)
ResponderEliminarBesos.
Será por viajes pendientes. Tú anota que algún día podremos ir tachándolos de la lista
EliminarParece que tienes un radar incorporado qu detecta sitios maravillosos alli donde va. Y por suerte para nosotr@s una gran maestría con la cámara. Quién no iba a desear acompañarte a un desayuno o una merienda con esas fotazas! Gracias por compartir.
ResponderEliminarEste fue recomendación del dueño del apartamento, pero sí era un lugar para quedarse a vivir. Sencillo, pero con mucho encanto
Eliminar¡Yo también me teletransportaba! ¡Vaya sitio tan bonito y auténtico!
ResponderEliminarTe prometo que me ha llegado el olor del pan y los bollos hasta aquí. ¿Será por tus estupendas fotos?
Un beso.
Pues nada, alarga la mano a la pantalla y coge uno, :)
EliminarPero que hambre me has dado!
ResponderEliminarCon esa preciosidad de niño que tienes ya hay medio post ganado! El sitio increíble, muy tupper! Me recordaste a mis desayunos en casa de mi abuela, que nos hacía tostadas con el pan de su pueblo, y esa mezcla con ola mantequilla y el Cola-cao no podrá superar a ningún otro desayuno del mundo por muy especial que sea! Aquel olor, aquel sabor y ese recuerdo a infancia feliz. Gracias por haberlos recuperado hoy para mí. Un beso!
ResponderEliminarQue sitio más maravilloso
ResponderEliminarTenía ya muchos argumentos para visitar Dinamarca. Esta panadería será el lugar ideal para los desayunos. No te olvides de presentarnos el apartamento. ¡Yo me lo apunto también!
ResponderEliminarQué hambre me ha entrado!!! un sitio precioso y con mucho encanto. Besos.
ResponderEliminar¡Qué maravilla de sitio!
ResponderEliminarUna razón más en mi lista para volver a visitar esa bonita ciudad.
¡Que tengas un buen día!
Con las ganas que tengo de visitar Dinamarca!! con estas fotos y esta descripción solo haces que tenga más ganas!! ains cuantos viajes pendientes!!!
ResponderEliminarUn saludo
guauu qué bello lugar
ResponderEliminargracias por compartir!
Que pinta el pan por dios¡¡
ResponderEliminarGuaaau, ¡qué sitio más chulo! Las panaderías de toda la vida se están perdiendo y es una lástima. Yo me hago el pan yo misma porque no tengo ninguna de esas cerca :(
ResponderEliminarDeberías escribir guías de viajes!
ResponderEliminarYo las compraba todas, y las fotos que fueran tuyas